Festival de Cine Escolar FESCIES
En 2008 los entonces egresados de la carrera de Cine Carolina Astudillo y Felipe Guerra buscaban una manera de llevar el séptimo arte a los colegios.
Ambos habían salido de liceos municipales donde la enseñanza artística era escasa, por lo que comenzaron a idear talleres de formación, cuyo producto final serían cortometrajes realizados por alumnos de enseñanza a media. A poco andar, se dieron cuenta que no tendrían
la ventana de exhibición necesaria y decidieron inventar su propio festival. Así, en 2009, nació FESCIES, el Festival de Cine de Estudiantes Secundarios.
Ya son trece las versiones realizadas del certamen, que han tenido aproximadamente unos 750 secundarios participantes por año; casi el 50% de los ganadores ha hecho efectiva la beca para estudiar Cine en la UV y entre tres a cuatro participantes por versión, sin importar que hayan ganado o no algún
premio o mención honrosa, ha entrado a la carrera.
Insigne es el caso de Francisca Dropelmann, alumna del colegio Champagnat de Villa Alemana, que integró como directora de arte el equipo
ganador de la primera versión, luego entró a la carrera y hoy es académica de la misma, junto con desempeñarse profesionalmente en su área de especialización.
Una de las principales transformaciones del certamen fue ampliar el rango de público, incluyendo a estudiantes de séptimo y octavo básico dado el interés creciente de colegios, por lo que se empezamó a crear contenido y talleres para ellos; además de integrar el segundo ciclo básico, por lo que el festival abarca a estudiantes de quinto
básico a cuarto medio.
En palabras de Felipe Guerra, FESCIES recibe un
promedio anual de 70 cortometrajes, con cerca de 400 competidores aproximadamente por año, más todos quienes asisten a charlas, foros, muestras, clases magistrales y conversatorios.
Entre los principales lugares de procedencia se cuentan Arica, Iquique, Quillota, Valparaíso, Quilpué, Viña del Mar, Chimbarongo, Santiago, Talca y Osorno. Por otra parte, se han realizado talleres de formación, de forma presencial, en Antofagasta, Ovalle, Santiago, San Felipe, Rancagua, Temuco y Juan Fernández. En época de pandemia y virtualidad, se recibieron más de 500 reproducciones por año.
FESCIES se posiciona como una plataforma para que los estudiantes fueran parte del desarrollo del audiovisual en Chile, en donde es posible hacer cine con las herramientas que tenemos a la mano. A raíz de esto, empezaron a surgir distintos festivales escolares, lo cual más que ser una competencia, es un aporte.
Con lo anterior, el festival abre el camino para que el audiovisual se tome en cuenta y se empiece a enseñar en los colegios, lo cual da sustento a su más grande legado. Así, FESCIES es una punta de alnza para que otros festivales audiovisuales siguieran el ejemplo de formar una red de contactos grande
En la actualidad, el objetivo del festival apunta a volver al origen de formación de audiencia, ampliando el certamen a otras artes, integrar disciplinas complementarias al desarrollo audiovisual y que los jóvenes aprendan que no es solo grabar, sino también mezclarse con otras áreas como fotografía, teatro, música, arte, biología marina, ecología, entre otras disciplinas.
El festival FESCIES es más que un concurso de video escolar; es una actividad de formación de audiencia para los jóvenes, con foco en la formación artística.
