La actriz, directora y académica de la Escuela de Teatro, Myriam Espinoza, fue destacada por el Centro Gabriela Mistral, como una de las principales mujeres de teatro a nivel nacional, a través de una entrevista realizada por la investigadora teatral María de la Luz Hurtado para indagar en algunos de sus personajes emblemáticos.

La entrevista pertenece a la serie de cortos audiovisuales "Relatos de actriz, en conversación con María de la Luz Hurtado desde las fotografías de Jorge Brantmayer" y se encuentra con acceso liberado en https://www.youtube.com/watch?v=JBxvyFZuLOY 

Myriam Espinoza fue entrevista por sus roles El extraño ser con alas y La señora de los globos en El extraño ser con alas, de Gabriel García Márquez, bajo dirección de Juan Edmundo González, que la Compañía CITE de Valparaíso puso en escena en 1989.

El ciclo de entrevistas gira en torno al trabajo del fotógrafo Jorge Brantmayer, quien registró cerca de 120 obras de teatro entre 1983 a 1992 y una de esas fue “El extraño ser con alas”.

La serie también incluye entrevistas a las actrices María Izquierdo, por su rol de
La Japonesita en La Negra Ester, de Roberto Parra y Andrés Pérez, con la compañía Gran Circo Teatro en 1989; Laura Pizarro, en Salmón vudú y Paulina García, por La Nancy en ¿Dónde estará la Jeanette?, de Luis Rivano del Teatro UC en 1984 y Eva en Cariño malo, de Inés M. Stranger, del Teatro UC en 1990.

En su relato, Myriam Espinoza comenta su encuentro con el director Juan Edmundo González, a quien calificó como “visionario, exigente y con un trabajo metodológico fuerte. Éramos un grupo de mujeres que hacíamos teatro político en dictadura, en 1988 decidimos buscar nuevos lenguajes para expresar lo que sentíamos y lo fuimos a buscar”.

“Con Juan Edmundo González aprendimos sobre transversalidad y colaboración, tenía una personalidad era muy fuerte, pero no era el que decidía, ya que entre todos construíamos los personajes, siempre nos decía que buscáramos dentro de nosotros. El vino a remecer a una ciudad dormida como Valparaíso, remeció nuestras conciencias y posturas, fue un tipo de Allende sacrificado” explica.

Sobre su rol de la mujer de los globos, la académica comenta que “era ingenua, romántica, era un personaje secundario con una vida de comparsa”. Mientras que sobre el personaje del extraño ser con alas, precisa que “era un personaje que amaba, lo había armado fusionando un poco la realidad con el imaginario, encontrando los textos dentro de mí”.

“Nosotros buscábamos ofrendar al teatro, para homenajear a nuestro pasado y fue una obra que gustó mucho”, agregó.