Nicolás Espinoza, coordinador del área de Creación y académico de Taller de actuación I y II, junto a Juan Pablo Troncoso, profesor de Estructuras dramatúrgicas y Técnica escritural, ambos de la Escuela Teatro, ganaron la beca bianual Ibsen Scope Grant entregada por el Ministerio de Cultura de Noruega, a través del Teatro Ibsen de la ciudad Skien.

La beca, que financia proyectos innovadores en el ámbito de las artes escénicas basados en una o más obras de Henrik Ibsen, permitirá a los académicos desarrollar su montaje “En toda alma hay una marca negra que es necesario ocultar”, basada en los pilares de la sociedad del dramaturgo, que estrenarán en noviembre de este año en Chile y los llevará a Noruega en 2024.

Ambos ya estuvieron durante la semana pasada el Ibsen Scope Festival del país nórdico donde presentaron el proyecto de creación, compartiendo con creadoras y creadores de países como Siria, Irán, Brasil y Líbano, entre otros. Nicolás Espinoza lo define como “una oportunidad para seguir investigando en la creación de experiencias escénicas mediadas por elementos audiovisuales y puestas en escena que cuestionan y tensionan diversos temas políticos y sociales”.

El académico señala que “Ibsen es un autor reconocido a nivel occidental, muy estudiado en las escuelas de teatro de nuestro país. Sus obras son ejemplos relevantes de textos comprometidos con la reflexión de temas sociales y políticos. Nuestra atracción por sus obras se profundiza el 2014 cuando creamos la puesta en escena de ‘Un enemigo del pueblo’, que reflexionaba sobre los límites y la fragilidad de nuestra democracia”.

“Esa obra nos permitió viajar por primera vez a Noruega para presentarnos en el Ibsen Festival organizado por el Teatro Nacional de Noruega en Oslo. Luego en 2019 trabajamos con ‘Casa de muñecas’, proceso que estuvo marcado por el estallido y que estrenamos en octubre de ese mismo año en Matucana 100. Estas experiencias nos han permitido adentrarnos en su dramaturgia para tomar las estructuras de sus obras como soporte para desarrollar creaciones que reflexionan sobre temas de nuestra realidad”, añade.

La sociedad de Ibsen

El equipo de “En toda alma  hay una marca negra que es necesario ocultar”, está integrado por Juan Pablo Troncoso en la dramaturgia; los actores María Paz Grandjean, Verónica Medel y Rafael Contreras; la diseñadora Catalina Devia; el diseñador multimedia Pablo Mois; el músico Federico Palma y la productora Coté Duran.

Al respecto, Espinoza comenta que “la obra está basada en los pilares de la sociedad de Ibsen, donde asistimos a la reconstrucción de los últimos días de vida de Bernick, alcalde de la localidad costera de Navidad, quien comienza a recibir extraños videos anónimos que impugnan su rol como líder del pueblo”.

“Refugiado en su casa, jugando con dispositivos tecnológicos y aislado de un país que se incendia, Bernick recibe las inesperadas visitas de Betty, su ex señora, y Lona, una antigua amiga, quienes lo enfrentan a fantasmas del pasado que suponía olvidados: aquellos que le permitieron llegar al poder y convertirse en un pilar de la sociedad”, añade. 

El académico asegura que “la obra lleva a escena el fin de una larga y penosa era que se resiste a morir. Tiempos desesperados en que la corrupción política, el extractivismo ambiental, la violencia patriarcal y el capitalismo salvaje se erigen como pilares de la sociedad, pero cuyo fin vislumbramos y deseamos”.

Sobre esta experiencia, Espinoza señala que “sin duda impacta en la actividad académica ya que me permite, tanto a académicos como estudiantes, conocer otras formas de desarrollo artístico. Además refuerza la convicción de que las instituciones deben comprometerse, de manera permanente, con el financiamiento de procesos creativos, más allá del resultado, con el fin de situarlos como elementos esenciales en la articulación y desarrollo del conocimiento”.